Los adelantos tecnológicos en materia de comunicación y digitalización favorecieron diferentes aspectos del consumo de servicios financieros y bancarios propiciando la inclusión financiera de aquellos sectores históricamente excluidos por los servicios tradicionales.
Asimismo, gracias a la utilización de plataformas tecnológicas, los usuarios no solamente tienen acceso a productos y servicios anteriormente restringidos, sino que aumentan su grado de conocimiento en materia económica y financiera.
Derribando barreras financieras a través de la tecnología
La inclusión financiera refiere al acceso que tienen los individuos y las organizaciones a productos y servicios financieros útiles y alcanzables que satisfacen sus necesidades y los ayudan a alcanzar el bienestar económico y la productividad, en el caso de las empresas.
Incluir financieramente a las personas es un desafío crítico para la evolución de la economía y, por este motivo, además de ser una prioridad para los gobiernos, es uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU para el 2030. En la última década, tanto la comunidad internacional como los gobiernos nacionales se han enfocado en crear un ámbito que favorezca la inclusión financiera, con el objetivo de diseñar un sistema de amplio alcance, que ofrezca estabilidad y un progreso equitativo para todos.
Los motivos que impulsan su relevancia para la comunidad internacional y local tienen que ver con diferentes aspectos:
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Relación entre la pobreza y la exclusión del sector financiero formal
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Preocupación por la creciente inestabilidad financiera
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Relación entre inclusión financiera y reducción de la informalidad de la economía
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Necesidad de la banca tradicional de expandir sus negocios
Al estar incluidas financieramente, las personas se conectan con el sistema financiero formal, lo que facilita su vida cotidiana y les brinda la posibilidad de generar activos, mitigar problemas económicos asociados a emergencias, ahorrar para el retiro u otro objetivo, y realizar inversiones productivas valiéndose del ahorro, del crédito, de los seguros y de los pagos.
¿De qué forma las nuevas tecnologías mejoran la educación y la inclusión financiera?
Son diversas las innovaciones tecnológicas que fomentan la inclusión financiera y ayudan a la población a obtener mayores conocimientos sobre temas relacionados con las finanzas.
Digitalización de las entidades financieras
Las nuevas tecnologías y la masificación del acceso a internet y a los dispositivos móviles propician la inclusión financiera de sectores de la población históricamente relegados. Hoy en día, es posible que las personas accedan a un producto o servicio financiero de manera remota, independientemente de dónde se encuentren, así como hacer cualquier tipo de trámite u obtener un crédito o tarjeta con tan solo algunos clics.
Esta realidad propició que las entidades financieras pudieran aumentar su oferta de productos y flexibilizar los requisitos de incorporación, basándose en la liberación de los datos de los usuarios, enmarcada en el modelo de Open Economy.
Cobros y pagos digitales
Otro de los retos que deben ser sorteados para promover la inclusión financiera es reducir el uso del efectivo. De acuerdo a datos del Banco Mundial, aproximadamente 280 millones de titulares de cuentas que viven en economías en desarrollo aún utilizan servicios en efectivo o en ventanillas para recibir o enviar dinero.
Las plataformas que permiten hacer pagos y cobros digitales simplifican las transacciones comerciales y las transferencias de dinero, lo que facilita la inclusión financiera de las personas y les brinda la posibilidad de virtualizar sus operaciones, sin necesidad de manejar efectivo ni desplazarse.
Fintech
No hay dudas de que las fintech tienen un rol fundamental en materia de inclusión financiera. Al responder a las necesidades de los individuos excluidos del sistema bancario tradicional, desarrollan soluciones tecnológicas que simplifican los procesos, facilitan la experiencia del usuario, mejoran la eficiencia de los servicios y posibilitan el acceso al crédito a personas y pequeñas organizaciones.
A su vez, las fintech también ponen a disposición de todos sus usuarios ahorros digitales, soluciones de transferencias transfronterizas y seguros.
Integrar en el ecosistema financiero a la población más vulnerable es clave para lograr un desarrollo económico equitativo. La digitalización de los servicios y productos financieros contribuye a promover la inclusión financiera, reduciendo —y en algunos casos eliminando— las barreras tradicionales que limitan la participación de los individuos en el sector financiero formal.
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