Las nuevas tecnologías están revolucionando el sistema financiero latinoamericano, y las Fintech se están convirtiendo en las grandes protagonistas de este nuevo escenario. Gracias a la escalabilidad en sus operaciones y el desarrollo de herramientas innovadoras, el auge parece no tener límites y está llegando a millones de personas que, hasta ahora, estaban excluidas del sistema financiero tradicional.
Un excelente ejemplo de este fenómeno es el mercado financiero mexicano, que experimenta un notable momento de digitalización y crecimiento gracias al surgimiento constante de nuevas Fintech.
Este panorama es posible gracias a las modificaciones en los regímenes legales del sector; que incluyen a la ley Fintech, al Código de Comercio, y a la Ley de Títulos y Operaciones de Crédito.
Estas tres leyes han potenciado la transformación digital en el ámbito financiero de México.
Ley Fintech
El objetivo de la Ley Fintech es regular este sector para brindar mayor certeza jurídica a su desarrollo, proteger a los usuarios y promover la inclusión financiera. La Ley Fintech regula las siguientes actividades:
1. Instituciones de financiamiento colectivo (crowdfunding)
2. Instituciones de fondos de pago electrónico (FPE)
3. Instituciones que ofrecen servicios financieros mediante nuevas tecnologías
Las Fintech que operan en México deben obtener autorización de la CNBV para poder operar.
Además de que la Ley Fintech fomente la transparencia en el funcionamiento del sector, mejorando la protección del usuario y su dinero, también protege a la industria emergente, reduciendo la incertidumbre regulatoria al brindar garantías y seguridad. A su vez, facilita el aumento de la bancarización en sectores históricamente al margen del sistema financiero.
¿Qué deben hacer las Fintech? Obtener autorización después de presentar a las autoridades su modelo de negocio y su funcionamiento legal, adoptar plataformas bancarias abiertas y poner a disposición del público toda la información correspondiente a la empresa.
Código de Comercio
La transformación digital también está cambiando la forma en que hacemos negocios y contratamos servicios.
Acompañando el reconocimiento de la Ley Fintech, la reforma del Código de Comercio refuerza y reconoce la validez y efectos jurídicos de la firma electrónica. De esta forma, se define y autoriza el uso de la misma para transacciones comerciales y empresariales. Incluso se reconocen aquellas que se encuentran expedidas fuera de México, siempre que tengan un grado de fiabilidad equivalente a lo exigido en el país.
Las modificaciones introducidas por esta ley generan ventajas relacionadas con la seguridad, los costos y la eficiencia para la firma de documentos y gestiones similares. En cuanto a las Fintech, en particular, agiliza muchos procesos y contribuye a la inclusión financiera de la población ya que, el hecho de no tener que presentarse físicamente para adquirir productos y servicios financieros aumenta las posibilidades de acceder a ellos.
Ley de Títulos y Operaciones de Crédito
La aprobación del Decreto que modifica esta ley también es un paso hacia la digitalización y la promoción de las Fintech, ya que establece que los títulos de crédito y pagarés podrán ser utilizados y emitidos a través de medios tecnológicos.
Dentro de esta categoría entran los medios electrónicos, ópticos o cualquier otra tecnología que permita generar, transmitir, recibir, entregar o procesar estos títulos y los actos asociados. Esto es válido incluso en las operaciones que requieran estar por escrito o con la firma autógrafa o manuscrita.
A su vez, la introducción de tecnologías digitales y sus procesos de validación garantiza la seguridad de las transacciones y disminuye la posibilidad de fraudes de crédito y robo de identidad. La reducción de costos que implica el uso de la tecnología facilita el acceso al crédito a más sectores de la sociedad, con formas de pago más eficientes y de fácil alcance.
Implicancias adicionales de las leyes:
Además de las regulaciones mencionadas, estas leyes fomentan la innovación y el desarrollo tecnológico en el sector financiero, abriendo oportunidades para nuevas empresas y modelos de negocios. Facilitan la adopción de tecnologías como el onboarding digital para mejorar la eficiencia y la seguridad en las transacciones financieras.
Estas tres leyes posibilitan y regulan la modernización de la economía hacia el sector electrónico y una transformación digital de los distintos sectores.
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